Powered By Blogger

9.12.2010

When all is said and done

Im back, después de ausentarme de mis escritos por un considerable tiempo, vuelvo a sentarme frente a la pantalla para poder describir como me siento ahora.
No recuerdo hace cuanto que del más profundo anonimato, una persona ha llegado a brillar tanto en estos días. Comenzó como un juego, el vernos mas que amigos, coqueteábamos ante la idea de ser ese algo mas, y entonces mas rápido que un guiño de ojo, empezamos a salir, vernos a escondidas en la universidad (porque creo que somos unos tímidos inmaduros) y cuando pude terminar de abrir el ojo (el del guiño) nos besamos.
Para ese entonces paralelo a esto, me encontré con L, lo impresionante fue que ni un miserable latido hizo su aparición, me aburrió el hilo de sus conversaciones, no le seguía en mis pensamientos, en fin, era obvio que toda mi atención había sido acaparada por ese otro antes anónimo.
Ya, luego del beso, el juego de las mil escondidas dejo de ser necesario, y empezamos a resaltar mas nuestras muestras de cariño (dícese de andar como empalagosos en un lugar público), los cuchicheos se hacían notar, resumiendo, si, estamos saliendo.
La condenada palabra, ESTAMOS SALIENDO, era nuestra justificación ante el tipo de ´´relación´´ que queríamos describir, puesto que, no se, llámenme anticuada, poco liberal, del año de la pera, pero si sales con alguien, aun eso los convierte en amigos, no creo en nada de la cochinada de amigos con derecho, pero las cosas se salieron de control, como uno de mis amigos lo definió, éramos agarres. Tanto el como yo sabíamos que esa definición de por si no era aplicable a lo que sentíamos, mas, había algo que hacia que me incomodara lo que esta aconteciendo, y era que al entrar en su ritmo, a escuchar su manera de pensar, sus ideales, hacia que las cosas que para mi eran claras, concisas y seguras, pasaran a cocinarse en un huevo revuelto de contradicciones, entre sus principios y los míos. Desde ese punto de partida, era inevitable que habría serias confrontaciones en las cuales, cada uno querría poner su bandera en el territorio del otro, todo se estaba complicando, revolviendo, convirtiéndose en una bomba de tiempo.
Soy celosa!, lo admito, pero cito una frase: Los celos no son malos, no son signos de desconfianza, son signos de necesidad!, ese fue el detonante que hizo que hoy todo acabara, el tiene una forma de actuar ante los gestos o actitudes que le incomodan (se guarda cada cosa que lo pone triste), pero yo no soy él, soy diferente, yo demuestro lo que siento, (en el sentido de mi fastidio), estalle! Y boom! Dije..ya fue!
La impulsividad que según yo había logrado manipular, salio como reina, cuando me di cuenta que me había precipitado fue demasiado tarde, el ya había cerrado su puerta (como lo explica él, metafóricamente), y nada de lo que yo pudiera hacer para encontrar alguna tregua, ayudaría a abrirla. Me avergüenzo de haberme esforzado por que no acabara, era lo que quería, pero su poca falta de palabras, su poco tacto al referirse que hasta ahí nomás, y su inmadura y desquiciada frase, no gracias, alivio que la decisión que al principio el estaba tomando fuera la mejor. LA GENTE DECEPCIONA…
Así es, estoy decepcionada, tal vez ambos lo estemos, pero de alguna manera somos muy diferentes, y eso hace que malinterpretemos al otro. Aprendí yo, a no dejarme arrastrar tan rápido en la marea de ajenos ideales, aprendió él, que no puedes querer entregar el mundo en un parpadeo a otro.

No hay comentarios:

Publicar un comentario