Pobre cabellera

La primera vez que me cambie…error la primera vez que me cambiaron el look fue gracias a mi señora madre, tenia algo de 8 años cuando por circunstancias que no recuerdo mi cabellera fue disminuida hasta antes de mi cuello, si, así de corto, parecía un chico, un hermano. La siguiente vez, fue en el colegio, la mayoría de veces lo llevaba recogido, no porque estuviera prohibido tenerlo suelto, sino porque no se me ocurría de que otro modo peinarlo, aparte que no me gustaba el corte. Recuerdo que en tercero de secundaria había terminado con el único chico con quien estuve del colegio, cuando se me ocurrió soltarme la cola (sonaría mejor soltarme la trenza pero ese no era el peinado) y empecé por llevarlo suelto. El tercer cambio de look fue por puro fashionismo según yo, imité el como se llevaba en ese tiempo, con un flequillo al costado(para los que no conocen este termino flequillo es referido a un cerquillo pero solo varía la posición, para un costado de la frente), pero, como siempre, fuera de serie, mi flequillo resulto ser un fracaso, pues tenia el cabello largo, al igual que el flequillo ( se supone que el flequillo tiene que ser corto para ser notado y no confundido con tu cabello), por esto que casi me tapaba la mitad de la cara, resultado: me confundían con una emo. El cuarto cambio de look también fue consecuencia de un rompimiento, pero no vario mucho, solo un pequeño arreglo pero que para mi fue una manera de aliviarme, el flequillo paso a ser cerquillo!
Así fue como me conocieron en la universidad, en ese tiempo también hizo su aparición las laciadoras y mi madre compro una (para las dos) he intente ser lacia (mi pelo es un ALGO extravagante, no es lacio del todo porque para mi lo que lo malogra es que tiene ciertas hondas en las puntas) por ello resulte como una imitación de la protagonista de La Teta Asustada, Magaly Solier. Luego pasé de nuevo al flequillo pero el ultimo gran cambio que tal vez sería mejor llamado arrebato fue cuando luego de dos años de tener una clase de relación (entre comillas) clandestina esta terminó y como era de suponerse también termino mi raciocinio en ese instante y fui directamente a la peluquería a que me cambiaran (otra vez) el look. Este cambio fue mas significativo porque me encontraba molesta, ofuscada, sobre todo con ganas de olvidar todo lo que me recordara esa absurda clandestinidad y que el verme al espejo no recuerde el haber estado del mismo modo en apariencia con ese maldito hijo de su madre!...(ya ven por que digo lo de molesta). Debo de ser sincera, fue un graso error haberme metido a una peluquería en ese estado, pues aun yo misma me arrepiento, el cambio no fue tan favorable como lo supuse. Hice que me cortaran toda la cabellera hasta casi la altura de los hombros, no, más alto que los hombros!(algo así como la primera vez, pero no tan look hombrecito) La primera reacción al verme al espejo fue: QUE CARAJ….O!!
Como digo, aún ando sobreponiéndome de eso, y solo espero que mi cabellera termine por crecer lo mas pronto posible, y bueno esperar también por si en otro arrebato mío (digamos fashionista o de rompimiento) termino por rasurarme la cabeza o la dejo en manos de cualquier chico reggae o hippie que en su afán de ganarse unos sencillos con mi dolor, termine haciéndome dreads.


<---dreads

no quiero terminar asi (sin ofender a los que llevan esa clase de peinado, no es mi estilo)